Formar en los niños y las niñas un paradigma de un mundo de paz, en armonía con sus iguales y con el medio que les rodea.

Crear relaciones con sus iguales y con los superiores de manera que puedan resolver conflictos, situaciones cotidianas y otros de manera democrática, pacífica y siempre en busca de un mundo mejor.

Crear una cultura de gestión sobre el riesgo para estar prevenidos ante posibles desastres.

Adquirir y practicar hábitos de alimentación sana.

Fomentar en los estudiantes la necesidad de una convivencia armónica con la naturaleza, así como la conciencia de qué solo este planeta tenemos y que es necesario iniciar un cambio de relación con él.

Desarrollar una cultura de sostenibilidad ambiental.

Inculcar el respetar a la diversidad cultural como derecho de los pueblos y de los individuos a su identidad.